martes, 30 de noviembre de 2010

Historia de los colores.

Este cuento nos explica la historia de los colores del Arco Iris, cuando en cierta ocasión, un buen día, hace mucho tiempo, los colores estaban enfadados entre ellos. El color azul tomó la palabra y dijo: “Yo soy el color más importante, soy el color del cielo, de los océanos, del agua del mar, de la vida,…”; entonces el color verde lo interrumpió y dijo: “No hables más, yo soy el color de la Naturaleza, de las hojas de los árboles, del césped, sin mí no habría vida en la Tierra,…”; a continuación, el color rojo dijo: “Calla, calla. Yo soy el color de la energía, de la fuerza, de la intensidad, del fuego, yo soy la vitalidad de los seres vivos.” El color amarillo tomó la palabra: “Yo soy el color de la luz, del Sol, sin mí no veríais.” El color violeta dijo: “ Yo soy el color que han elegido los altos mandatarios militares y altos jefes de Estado porque yo soy el color de la disciplina, del orden,…”; y, cada uno de los colores fue hablando dándose importancia de su color y despreciando a los otros, hasta que una luz blanca de un rayo los asustó de tal manera que se cogieron, otra vez, de la mano para arroparse y ayudarse, en aquel instante la luz blanca dijo: “¡Callaos!, ¿no os dais cuenta que si camináis solos no seréis nadie, por el contrario, si andáis juntos podréis hacer grandes cosas? Nunca tenéis que caminar por separado, siempre tenéis que ir juntos y os tenéis que ayudar y querer los unos a los otros.”
  Desde aquel día, los colores del Arco Iris, siempre fueron juntos y nunca se han separado y, nunca se separarán.

Cuento "imposible".


  Dedicado a mi querida esposa Carmen.

  Un día, mejor dicho, otro viernes por la noche, como cada viernes a la misma hora, en el mismo bareto, quedé con mis amigos para salir a divertirnos (sanamente) un par de horas. Fue entonces cuando me di cuenta de la cruda realidad de la vida, de lo prisioneros que somos de nuestros haceres y nuestro destino:

“Era lunes a las siete de la mañana, cuando el sonido del despertador me alteró mis sueños, me levanté de la cama, me afeité, me aseé. Después de vestirme con un elegante traje de color azul marino, camisa blanca y corbata a juego, me dispuse a desayunar un café con leche rápidamente. Salí a la calle para coger mi coche del garaje particular. Un precioso coche descapotable color negro con asientos de cuero. En la guantera, siempre llevaba música moderna que escuchaba de camino a la oficina. Aparqué mi coche en el aparcamiento reservado para los altos ejecutivos de la empresa. Cogí mi maletín lleno de papeles y, me dirigí a coger el ascensor que me llevó a la planta número cincuenta de ese rascacielos, no sin antes saludar al portero. Era un hombre mayor, a punto de jubilarse, era un tipo simpático, ¡qué lástima! Al llegar a mi lugar de destino, recorrí un largo pasillo, a cuyos lados habían pequeños despachos. El mío tenía vistas a gran parte de la ciudad de Nueva York. Vino mi secretaria a decirme la agenda para ese día: a las nueve horas, desayuno con el jefe; a las diez, reunión con un alto mandatario de la empresa Lotus; a las doce horas, reunión con el director del banco; a las trece horas, comida en casa del jefe, hoy es el cumpleaños de su mujer; y, así seguía hasta las diecinueve horas, hora de irme a mi casa. Cuando llegué a casa, dejé las llaves en la mesita del comedor, me quité la ropa y los zapatos hasta llegar al baño, donde durante más de quince minutos me duché. Mañana, María, la asistenta me cogería la ropa que dejé por el suelo. Después de la ducha con agua no muy caliente, para poder despejarme de tanto estrés acumulado y, tantas sonrisas falsas y forzadas, me puse el pijama de seda y bajé a la cocina, fui a la nevera para coger lo primero que encontré. Me lo comí sentado en el sofá mientras miré la tele. Cuando me entró el sueño, me acosté.
  Hoy es martes, las siete de la mañana, suena el despertador, me levanto, me afeito y me aseo; me visto con un traje de color gris y camisa azul celeste, tomo un café con leche. Me monto en mi descapotable; cojo el ascensor, saludo a los empleados, recorro el largo pasillo, entro en mi despacho, miro por el ventanal; me habla mi secretaria; asisto a reuniones y comidas con altos empresarios; llega la noche, me ducho, ceno, miro el televisor y, me acuesto.
  Mañana será miércoles, a las siete de la mañana sonará el maldito despertador, me levantaré, me afeitaré, me asearé, me vestiré con un traje de color beige y camisa blanca, tomaré un café con leche, como cada día. Cogeré mi descapotable, subiré en el ascensor, saludaré a la gente, andaré por el largo pasillo, miraré por el ventanal y, otra vez la secretaria me dirá todo lo que deberé hacer durante la jornada, es decir, mi vida está programada al minuto. Llegará la noche y me iré a mi casa, me ducharé, cenaré, pondré la televisión y, me iré a dormir.
  Así día tras día, año tras año,…
  Hasta que un día digo: “Bassssstaaaa”.
  Es lunes, suena el maldito despertador a las siete de la mañana, lo cojo y lo estampo contra la pared, me doy media vuelta y duermo dos horas más. Me despierto por el trino de un pájaro que esté en la repisa de la ventana. Me levanto y miro por la ventana, ¡qué día tan bueno, qué sol tan agradable! Me lavo la cara y desayuno cómodamente sentado en el sofá mientras leo la prensa. Salgo a la calle vestido con unos vaqueros azules y un jersey blanco y, me voy paseando hasta llegar al parque que está más allá de las avenidas, me siento en un banco situado al lado de un lago artificial; veo andar una pareja de ancianos álgidos de la mano y, mujeres paseando a sus bebés. Veo ciclistas y gente haciendo footing. Veo patos y pájaros bebiendo de la fuente. Estoy largo tiempo sentado en un banco mirando la vida que me pierdo. Me levanto y voy a pasear a ninguna parte, simplemente observo lo bello y hermoso que es vivir. Tengo hambre y me paro en el primer bar que encuentro a tomar un bocata con una cerveza; sigo mirando lo mucho que me estoy perdiendo. Me voy a andar por las calles mirando anonadado los escaparates y las personas que están a mi alrededor, todas con sus historias y con sus histerias, unas más elegantes, otras más viejas, pero todas viven su vida. Llego a casa, ya de noche, me afeito y me baño. No tengo hambre, ya me ha bastado con todo lo que he visto.

  ¿Hasta cuándo vas a estar atado a las cadenas de la rutina? ¡No eres consciente de lo mucho que te pierdes! Pero, recuerda…el título de esta historia es: cuento “imposible”.

A la segunda.


  Siempre que nos reunimos y, lo hacemos una vez al mes, mis cuatro amigos de la infancia y yo, acabamos hablando de lo mismo: de baloncesto. Antes, de jóvenes, jugábamos al deporte de la canasta, ahora ya han pasado muchos años y quien no tiene unos kilos de más, tiene unos cuantos pelos de menos. He aquí la historia que uno de nosotros contó en cierta ocasión:
  “Siempre había soñado en meter la canasta que nos diera el triunfo…, una noche soñé que encestaba y ganábamos el partido. Pues bien, al cabo de una semana, tuve la oportunidad de hacer realidad mi sueño: perdíamos de un punto, yo tenía que lanzar dos tiros libres, si encestaba los dos lanzamientos ganaríamos. Estaba yo sólo en la línea de personal, respiré hondo, miré el aro, boté dos veces, volví a mirar la canasta (por cierto, cada vez se hacía más pequeña), volví a botar, lancé y fallé. No pasaba nada, tenía otro lanzamiento, de encestar empataríamos el partido; boté dos veces, miré el aro, respiré hondo, tiré y fallé otra vez… El mundo se me cayó encima, quería desaparecer.
  - No pasa nada, es sólo un partido.-me dijo el entrenador.
  - Claro, con que no has sido tú el que ha fallado. Pensé entre mí.
  Pasaron cinco veranos con sus respectivos inviernos y, el destino quiso ponerme en mis manos la misma situación. Recuerdo que jugábamos la final del campeonato, estábamos en el final del partido cuando yo disponía de dos lanzamientos desde la línea de personal, si los encestaba, ganaríamos… Cogí el balón, boté dos veces, miré el aro, respiré hondo, lancé y encesté. Ahora íbamos empatados, volví a coger el balón, boté dos veces, miré, respiré, lancé y volví a encestar. Ganamos el partido y el campeonato, pero para mí fue mucho más que eso, saldé una deuda con mi pasado.”

  La vida siempre te da una segunda oportunidad para resarcir lo que en su día hiciste mal. De ti depende aprovecharla o dejarla escapar… Yo de ti, estaría muy atento y no la desaprovecharía porque sólo así podrás ser feliz.

sábado, 13 de noviembre de 2010

Frases y proverbios.

Frases de amistad:

  “El que te habla de los defectos de los demás, a los demás habla de los tuyos.”
  “La única manera de tener un buen amigo, es serlo.”
  “Con dinero se puede comprar todo…menos la amistad.”
  “Un amigo es uno que lo sabe todo de ti, y a pesar de ello te quiere.”
  “Todo el mundo quiere tener un amigo, pocos se toman la molestia de ser uno.”
  “Un amigo nunca te dice lo que tú quieres escuchar, te dice la verdad y lo que es mejor para ti.”
  “Cuando nos duele la muela, acudimos al dentista; cuando nos duele el corazón, acudimos a nuestra pareja; y, cuando nos duele el alma, acudimos a nuestro amigo.”
  “No busques dinero en mí; no me persigas para dar la vuelta al Mundo; sólo te prometo una cosa: mi amistad incondicional.”
  “Los verdaderos amigos se conocen en la adversidad.”
  “Quiero ser tu fortaleza en tu debilidad, quiero ser tu apoyo y contigo poder contar.”
  “Si un día te dan ganas de llorar…llámame, no prometo hacerte reír, mas puedo llorar contigo.”
  “Una buena fuente se conocerá en la sequía; un buen amigo, en la adversidad.”
  “La mayoría de las personas entran y salen de tu vida, pero sólo los buenos amigos dejan huellas en tu corazón.”
  “Si los besos fueran agua, te daría un mar. Si los abrazos fueran hojas, te daría un árbol. Si la vida fuera un plante, te daría una galaxia. Si la amistad fuera la vida, te daría la mía.”
  “Hacer un amigo es un don…, tener un amigo es una gracia…, conservar un amigo es una virtud…, pero tenerte a ti como amigo, en serio…es un honor.”
  “Los presos pierden la libertad; el Firmamento, a su estrella fugaz; los enamorados pierden la cabeza; y cuando pierdes a un amigo, pierdes la vida.”
  “Al final, no nos acordaremos tanto de las palabras de nuestros enemigos, sino de los silencios de nuestros amigos.”
  “Si plantas una semilla de amistad, recogerás un ramo de felicidad.”
  “Cuando te duele mirar hacia atrás y te da miedo mirar adelante, mira hacia la izquierda o la derecha y allí estaré, a tu lado.”
  “La amistad es el ingrediente más importante en la receta de la vida.”
  “Un verdadero amigo es alguien capaz de tocar tu corazón desde el otro lado del mundo.”
  “Un verdadero amigo es quien te toma de la mano y te toca el corazón.”
  “Un amigo es fácil tenerlo, un amigo verdadero cuesta encontrarlo y, un amigo verdadero y para toda la vida es difícil mantenerlo.”

Frases de amor:

  “Si quieres amar a Cristo, tu amor tendrá que abrazar al mundo entero.”
  “No te digo mi vida, te digo mi amor, porque mi vida se termina y, mi amor por ti no.”
  “¿Sabes qué es lo más bonito de mis ojos? El reflejo de los tuyos.”
  “Hay muchas maneras de cantar; hay varias formas de pensar; hay infinitos estilos de escribir; pero sólo hay una manera de decir te quiero: es con el corazón.”
  “El amor es como un microbio al que no puedes matar, cuando te gusta una chica no lo puedes remediar.”
  “A nuestra manera y según nuestra capacidad, todos podemos contribuir a alegrar a los demás.”
  “En la vida todos tenemos un secreto inconfesable, un arrepentimiento irreversible, un sueño inalcanzable y, un amor inolvidable.”
  “Tener verdadero éxito en la vida es: reír mucho y muchas veces; ganar el respeto de las personas inteligentes; gozar del cariño de niños; ganar el reconocimiento de personas cualificadas y saber soportar la traición de falsos amigos; apreciar la belleza; buscar lo mejor en los demás; dejar el mundo un poquito mejor de cómo lo encontraste; y, saber que al menos alguien ha vivido mejor gracias a ti.”

Frases de la vida:

  “La vida se ha de tomar con amor y con humor. Amor para comprenderla y, humor para sobrellevarla.”
  “La vida incluye, entre otras muchas cosas, un viaje gratis alrededor del sol todos los años.”
  “Lo importante no es mantenerse vivo, sino mantenerse humano.”
  “El libro es un alimento que no tiene fecha de caducidad.”
  “La vida es así, sólo tienes que disfrutarla.”
  “No es más ciego el que no tiene ojos, sino el que no quiere ver.”
  “No señales nunca a nadie, porque al señalar pierdes toda la razón.”
  “Cuando la vida te de la espalda, no te agobies ni te preocupes. Cuando la vida te sonría, no te fíes. Mantente siempre fiel a tus principios.”
  “Ante la adversidad, no te hundas; ante los problemas, lucha; ante las dificultades, mantente firme; sé siempre positivo ante la vida, sé optimista.”
  “No debemos pensar que nuestro tiempo pasó. Mientras aquí estemos, siempre habrá algo para aprender y mucho por hacer.”
  “La vida es un sueño, si te despiertas, cierra los ojos y vuelve a soñar.”
  “Tres cosas irrevocables para la vida son: el tiempo, las palabras y las oportunidades,… Tres cosas que no debes negarla a tu vida son: serenidad, honestidad y esperanza,… Tres cosas que deteriora la vida son: el orgullo, la arrogancia y el enojo,… Tres cosas que son tu elección: tus sueños, tu éxito y tu destino,… Tres joyas que se tienen en la vida son: la autoestima, el amor y verdaderos amigos,…”
  “La pereza es la madre de la pobreza.”
  “Cuando no sepas qué hacer, siéntate y disfruta viendo pasar la vida.”
 
Frases de religión:

  “La existencia de Dios es más cierta que el más cierto de todos los teoremas de la Geometría.”
  “Hermanos pensad que lo más importante en la vida es: la oración, tener Fe y, ánimo.”
  “La Luz Divina envuelve mi cuerpo y me da salud, envuelve mi espíritu y me da alegría, sé optimista.”
  “El amor es la escalera que puso Dios para que el alma pudiera subir al Cielo.”
  “El Señor es mi pastor, nada me faltará.”
   “Alegraos porque vuestros nombre están escritos en el Cielo.”
  “No presentéis a Dios un corazón entristecido, estad siempre alegres.”
  “Hacer un serio esfuerzo para escuchar y aceptar tal como son los que viven conmigo.”
  El Papa Juan Pablo II concluyó de esta manera la plegaria que versaba sobre la guerra en Bosnia’95: “Pido a Dios que toque los corazones e ilumine los espíritus descarriados.”
  “Cuando recen no hagan como los hipócritas, que gustan orar de pie en los templos y, en las esquinas de las plazas, para que los hombres los vean… tú, cuando reces, busca el silencio, cierra las puertas, y, reza al Padre que comparte tus secretos y, Él que los secretos te premiará. Al orar no multipliquen las palabras como hacen los que piensan que por mucho hablar serán atendidos.
  Antes que pidan, el Padre sabe lo que necesitan.”

Frases de autoestima:

  “No todo son casualidades para el sabio. El esfuerzo puede ayudar a la buena suerte.”
  “Un buen líder no acapara toda la gloria, pero sí acepta toda la responsabilidad cuando salen mal las cosas.”
  “La sonrisa cuesta menos que la electricidad y da más luz.”
  “Cuando nos creemos el centro del Universo, tendríamos que mirar en nuestro interior y ser un poco más humildes.
  “La pereza es la madre de la pobreza.”
  “La única persona que impide que avances, que triunfes, que logres nuevas metas en la vida eres tú.”
  “Lo pasado ha huido, lo que esperas está ausente, pero el presente es tuyo.”
  “El que no considera lo que tiene como la riqueza más grande, es desdichado aunque sea dueño del mundo.”
  “El hombre tiene la facultad de modificar su vida, modificando su actitud mental.”
  “Caerse está permitido, levantarse es obligatorio.”
  “Si te caes siete veces, levántate ocho.”
  “Qué maravillosa ha sido mi vida,…ojalá me hubiera dado cuenta de ello antes.”
  “La felicidad humana no se logra con grandes golpes de suerte que pueden ocurrir pocas veces, sino con pequeñas cosas que ocurren todos los días.”
  “Si crees totalmente en ti mismo, no habrá nada que este fuera de tus posibilidades.”
  “El bosque sería muy triste si sólo cantaran los pájaros que mejor lo hacen.”
  “Lo que cuenta no es lo que das, sino el amor con el que lo das.”
  “A veces sentimos que lo que hacemos es tan sólo una gota en el mar, pero el mar sería menos si le faltara una gota.”


Proverbios:

  “Las lágrimas derramadas son amargas, pero más amargas son las que no se derraman.” (Irlandés)
  “Si un problema tiene solución, no te preocupes; y, si la tiene, ¿para qué has de preocuparte.” (Chino)
  “Las palabras se las lleva el viento, lo escrito permanece para siempre.” (Latino)
  “Con dinero en el bolsillo, se es atractivo, inteligente y, hasta se canta bien.” (Judío)
  “A fuerza de ir todo mal, comienza todo a ir bien.” (Francés)
  “Antes de cambiar el Mundo, da tres vueltas por tu casa.” (Chino)
  “Antes de juzgar a una persona, camina tres lunas en sus zapatos.” (Hindú)
  “Aquel que pregunta, es un tonto por cinco mi9nutos, pero el que no pregunta, es un tonto para siempre.” (Chino)
  “Cuando apuntas con un dedo, recuerda que los otros tres te apuntan a ti.” (Inglés)
  “Dame un pez y cenaré esta noche, enséñame a pescar y cenaré siempre.” (Chino)
  “La gente se arregla todos los días el cabello, ¿porqué no se arregla el corazón?” (Chino)
  “Yo me quejaba porque no tenía zapatos, hasta que conocí a un hombre que no tenía pies.” (Árabe)
  “La primera vez que me engañes, la culpa será tuya. La segunda, la culpa será mía.” (Árabe)
  “El que busca un amigo sin defectos se queda sin amigos.” (Turco)
  “El victorioso tiene muchos amigos; el vencido, buenos amigos.” (Mongol)
  “Las grandes obras las sueñan los genios locos. Las ejecutan los luchadores natos. Las disfrutan los felices cuerdos y, las critican los inútiles crónicos.” (Español)
  “El que nada duda, nada sabe.” (Griego)
  “La más larga caminata comienza con un paso.” (Hindú)
  “El perezoso considera suerte el éxito del trabajador.” (Inglés)
  “La diplomacia consigue más triunfos que los cañones.” (Inglés)
  “La persona que no comete una tontería, nunca hará nada interesante.” (Inglés)
  “Añorar el pasado es correr tras el viento.” (Ruso)
  “Por la ignorancia nos equivocamos y, por las equivocaciones aprendemos.” (Romano)
  “Después de que el barco se ha hundido, todo el mundo dice que sabía cómo se hubiera podido salvar.” (Italiano)
  “El sabio no dice nunca todo lo que piensa, pero siempre piensa todo lo que dice.” (Aristóteles)
  “Lo que hacemos en la vida tiene su eco en la eternidad.” (Gladiador)
  “Cuando los elefantes luchan, quien sufre es la hierba.” (Africano)
  “La vida es la novia de la muerte.” (Indú)
  “Una vez terminado el juego, el rey y el peón vuelven a la misma caja.”